Empieza la mañana, muy, muy temprano. Despertador a las 4:15 am, dos móviles y la recepción del hotel, no vaya a ser que me duerma!!! Tenia hace meses seleccionado bus de la organización, a las 6:am, pero a las 5:30 am ya estaba a bordo de uno de los mas de (no se cuantos, había una fila interminable) buses que tenia preparada la organización, para trasladar a la gente que había elegido salir desde Midtown.
La ciudad, a esas horas ya tiene bastante movimiento,taxis, camiones de reparto,sirenas (siempre en NY están sonando sirenas) Recordar : NY ,the City that never sleeps. El Metro funciona la 24 horas. Y por supuesto los aguerridos runners de este gran evento, que nos dirigíamos desde los distintos hoteles de esa zona hasta la New York Public Library.
Llegamos a Fort Wadsworth (Staten Island) en unos 45 minutos, todavía de noche, aunque ya empieza a clarear, a pesar del cambio de hora.
Ahí nos dividimos en tres áreas : Blue, Orange or Green. Dentro de cada color hay Tres waves que marcan la salida 9:40, 10:10, 10:40 Yo tengo asignado Color Blue, Wave 1 Corral 8.
Dentro esta todo muy bien organizado, aseos a puñados. Café, infusiones, barras energéticas, bagels, agua suficiente, dos carpas, que ya esta ocupadas con gente tumbada, metida en los sacos, encima de los cartones, envueltos en sus mantas, comiendo, durmiendo, parece mas un campamento de refugiados que la salida de la prueba mas famosa del mundo.
Yo, como muchos otros paseamos por el recinto,localizo donde esta la entrada de mi corral, tomo un par de cafés, un bagel, una barra energética. Los primeros rayos de sol empiezan a asomar, me siento por fin, con esos tímidos rayos calentándome la cara. Con esos primeros rayos la gente s e hace mas habladora, charlo con dos runners canadienses, una runner NewZelandesa, con su correspondiente camiseta de los All Blacks, dos runners suizos, intercambio impresiones con un runner de Alaska, bueno no sigo contando, porque esto es como la ONU.
A la 8 10 abren mi corral, por lo que sobre las 8 dejo la ropa de abrigo, y una camiseta en uno de los 66 camiones que UPS ha cedido a la organización, y ya solo con una cazadora de papel windproof (encima de la ropa con la que voy a correr, que compre por 10$ en la feria del corredor), me dirijo al corral, en el que estamos unos 800 corredores. Mas Aseos, ya en este recinto. A las 8 55 se cierran los corrales de la Wave 1, y se anuncia que en 20 minutos se abrirán los de las Wave 2.
A la 9 empezamos a unirnos los corrales de la Wave 1, y la gente ya empieza a quitarse la ropa de mas que lleva, y dejarla, la minoría en unos contenedores , la mayoría la deja tirada en el suelo según le viene en gana.
Nos dirigimos hacia lo que va a ser la salida, que es el inicio del Verrazano quedando a la izqda, el Peaje Toll del mismo a la derecha, y dos helicópteros sobrevolando la multitud que nos hemos juntado para la salida de esta primera Ola.
A las 9 40 canto a capela el himno y con la música de New York New York de Frank Sinatra, cañonazo y comienza el Espectáculo.
Sabéis ese paisaje que os ha quitado el aliento, al que habéis sacado decenas de fotos, y todas desmerecen la realidad, que se las habéis enseñado vuestros amigos, familiares, y vosotros mismo veíais que no era lo mismo, que faltaba algo, algunas veces un poco, otras un mucho. Si, seguro que si alguna vez os ha pasado esto. Pues creerme, La Maratón de NY es lo mismo, no hay palabras, hay que vivirla, y desde dentro. Se pueden ver videos, fotos, leer crónicas, pero amig@s, hay que estar ahí, por lo menos una vez en la vida.
2 primeras millas, Verrazano-Narrow Bridge,no es tan fiero como lo pintan, quizá por que es el principio, pero viendo los helicópteros grabar a la altura de los corredores
a ambos lados del puente, os puedo asegurar que ni os enteráis, el peligro es que la adrenalina os haga ir mucho mas, no digo un poco, sino mucho mas deprisa de vuestro ritmo marcado. No fue mi caso, ritmo de 5 pero era solo el principio.
La entrada en Brookling,donde se une la Ola Uno del Color Naranja, y un poco mas adelante la Ola Uno del Color verde, es mucho mas espectacular de lo que podría haber soñado, el ruido es alto, Carteles banderas, bandas de música (Rock, gospel, Latina, Gaitas, Acordeones, Percusión, etc., etc.)
muchos familiares, pero sobre todo muchísimos vecinos, con muchísimos niños, que extienden sus manitas para que con un simple gesto de tocárselas con la palma abierta, se les llene la cara con una sonrisa, uno esta fresco ahora, y tiene que disfrutar estos momentos, carteles hechos a mano con leyendas como “Do epic Shit”, ”run like you stolen something”, ”Chuck Norris never ran a marathon”, “black toe nails are sexy”, hacen llevar a uno la sonrisa en la cara estas 11 millas, Gatorade y agua cada milla, el suelo alfombrado de vasos desechables, como habreis visto en múltiples fotos.
No merece la pena llevar Música (no la podríais oír, os lo juro), el ruido de ambiente es tan alto, tan variado, tan emotivo, que es imposible aislarse de el.
Entramos en Queens, a través del Pulaski Bridge, un cartel nos anima a “make that bridge your bitch” donde esta la marca de la Media, tiempo según lo previsto, un poquito por debajo de las dos horas, y con las fuerzas dosificadas. Corto recorrido por Queens hasta la milla 15, donde sin contar el Muro mas adelante, esta el gran “ tapado” ' de la prueba “The long silent bridge” o el oficialmente llamado Queensboro Bridge, casi una milla de subida, tan silencioso, tan frío, con tanto aire, en penumbra , sin bandas de música, sin familiares, ni banderas, ni carteles, sin vecinos, solo pisadas, por primera vez y casi después de 25 Km., escuchas tu propia respiración.
Empieza una ligera bajada, y algún cartel que indica “no more Bridges” (no es correcto quedan dos pero nada comparable con este ), y otro que uno no sabe si llorar o reír “If ten miles to go is easier, then welcome to easier”.
Y de repente Manhattan, First Avenue, es como una inyección de Adrenalina en vena, uno se olvida de repente de la milla sufrida, que ya queda atrás, en la intersección con la 72 he quedado con mi mujer, que va con una amiga, y con nuestra bandera Española de la Suerte (Semifinales del Mundial de Futbol , eliminatoria Davis en Austin), estoy bien, me acerco a las vallas, la doy un beso, siento la energía que desprende todo el publico allí concentrado,
y me desvío al centro de la avenida, para centrarme en lo que esta por venir (mi rodaje mas largo en la preparación, fue la media que corrí en Octubre, por lo que llevo ya varios kms en terreno desconocido) He tomado un gel cada hora, en la milla 17 dan geles,pero no cojo ya que hasta que me quedan dos, y me empiezan a pesar. Sigo hidratándome cada milla, un poquito de GAtorade y un buchito de agua.
Milla 19 entrada en Harlem, y rápidamente el Willis Avenue Bridge y entrada en el Bronx, menos gente,los familiares, ya no suben hasta allá, por lo que son pocos, pero muy animosos, ya las fuerza empiezan a estar justas.
Milla 21 Madison Avenue Bridge, entrada de nuevo en Harlem, empieza a reunirse otra vez muchisimos espectadores, al fondo ya se empieza a adivinar las arboledas del Centra Park.
Milla 22, se acabo el combustible, la reserva esta agotada, hay que tirar de corazón, miro el Garmin, y todavía voy en tiempo de bajar de las 4 horas pero no tengo gasolina. Asumiendo el hecho, me relajo y me decido a acabar a toda costa, pero ya sin presión de tiempo. No me duele nada, y me duele todo, no tengo ninguna molestia especifica, solo estoy vacio, curiosamente no se me pasa ninguna idea negativa por la cabeza, muchísima gente por aquí ya también va andando a ratos. Leo un cartel “ Only 1% of the people worldwide has finished a marathon”, me motiva, o tro,” i am so proud of you” de un completo desconocido , cualquier detalle me motiva, ya he perdido el arrojo del corredor, la dureza que se nos supone, marcados por esas sesiones de entrenamientos, esos madrugones, esas series, esas tiradas largas, ese estudio de los tiempos, de los recorridos, la planificación milla a milla, Km. a Km., la alimentación, ahora de poco sirve, ya solo quiero llegar,y cualquier ayuda exterior, es mas que bienvenida. Gente del publico que da gajos de naranja, , trozos de plátano, todos empujan, cada uno a su manera.
Ando, troto, ando, caen las millas 23,24 ( una voluntaria, casi una niña, a grito pelado “Almost there, almost there, you dit it, you dit it”. Mi mujer esta ya en Central Park, ya no hay beso, ya solo levanto la mano, e intento sonreír, voy trotando, no se si la he engañado, creo que no ( al final me confeso que si, que pensó que iba bien). La animación es ensordecedora, pero ya escucho poco, como ultimo reto, me propongo trotar hasta el final, ya sin andar, lo cual consigo a duras penas, hasta la marca de 400 metros, donde ya se me pasan todo los males, y ya veo la leyenda final “RUN FOR LIFE ”, increíble, no puedo describir la sensacion.Pero vosotros “Runners” os la podéis imaginar. Soy FINISHER en la Maratón de Nueva York!!
Medalla, Capa térmica, bolsa de hidratación, y paseo de casi 15 minutos hasta los camiones de la ropa. Imagen para grabar, todo contentos, todos con nuestras capas, nuestras medallas, algún corredor atendido por los servicios médicos, pero íbamos todos, y digo todos andando como si nos acabásemos de bajar de un caballo después de días cabalgando.
“I did It” Eso es lo importante.
Al final la organización me ha adjudicado un par de minutos mas, pero que es eso comparado con el orgullo de sentirme otra vez Maratoniano.
Ahora toca recuperarse. Los proxímos objetivos tendran que esperar, ahora solo toca disfrutar.
Felicidades por esa emotiva crónica y por tu finisher, veo que has vivido con pasión todo lo que rodea a la Maratón, sobre todo si es la de NYC. Enhorabuena.
ResponderEliminarFelicidades por ese sueño hecho realidad!!...Magnífica carrera y magnífica crónica...ahora a descansar y a pensar en nuevos retos
ResponderEliminarsaludos
Mi más sincera enhorabuena. Totalmente envidiable. Me alegro de que la hayas disfrutado. Gracias por compartir la crónica.
ResponderEliminarSalud!
Ahora no se porque felicitarte, si por tan excelente cronica, o por haber corrido esta maraton. Supongo que por ambas.
ResponderEliminarMe trasladaste a correr contigo con cada detalle, hasta las piernas quisieron levantarse del escritorio y salir corriendo.
Muchas felicidades CAMPEON y disfruta de este momento de gloria que bien ganado lo tienes. Un abrazo!!!!
Muchas FELICIDADES por ese Maratón, es una gozada tu relato, al final dices que faltaron las fuerzas.. conozco poca gente que en el km 42 valla sobrado de fuerzas, quiero decir que no eres el único.
ResponderEliminarTomas mi padre también se llamaba Soria de apellido, por desgracia ya no lo tengo.
UN SALUDO Y TE SIGO OK
Caramba, me encantó leerte, se me han puesto los pelos de punta.
ResponderEliminarLa ciudad y la carrera... maravilloso. Gracias por contárnoslo.
Un saludo desde muy lejos.
Enhorabuena, que buena crónica. Me he sentido como si corriera a tu lado. Ya eres finisher de NY. Espero estar ahí pronto. Felicidades
ResponderEliminarTomás muchisimas felicidades, lo hiciste y eres Finisher en la Maratón de NY, he estado corriendo contigo metro a metro, sobre todo ese maldito puente de Queensboro, nos has transmitido perfectamente todos los sentimientos.
ResponderEliminarEspero repetir tu experiencia si todo me respeta en 2014.
Un fuerte abrazo
Como te dije el otro día, enhorabuena. ¡Qué envidia me das!
ResponderEliminarA ver si el año que viene voy con mis colegas maratonianos. Sólo tengo que empezar a ahorrar ya...
Es increible lo que una maraton puede unir a miles de personas, todas ellas con un objetivo, pero sobre todo la de cruzar esa meta, y ser uno de los muchos priveligiados de poder decir que New York cerro sus carreteras al trafico por Mi.
ResponderEliminarY claro que tienes mi permiso, yo tambien me voy a tomar esa misma licencia.
Un saludo
Felicidades por la carrera y por la experiencia.
ResponderEliminarY gracias por la crónica, me ha gustado mucho. Me quedo con la sensación que cuentas de ese momento en el que puedes escuchar tu resporación después de tantos kilómetros (millas) de ruido, música y animación de la gente. Ese momento es mi preferido, cuando se hace el silencio, se acaba la charanga y hay que poner sobre el asfalto todo lo que se tiene y ese poquito más que nosotros los maratonianos sabemos sacar de no se sabe donde.
Un fuerte abrazo, eres un hombre feliz, seguro.
Tomás, con tu crónica ¡¡SE ME SALTABAN LAS LÁGRIMAS COMO A UNA QUINCEAÑERA VIENDO "GHOST" POR PRIMERA VEZ!!
ResponderEliminarMe ha encantado.
...
¿tu no has pensado dejarte de tanto watercolorear y hacerte periodista deportivo, que te veo más futuro?
jajaja.
Si Dios quiere correre mi primera maraton en Sevilla, pero algun dia me encantaria hacer algo asi,saludos si no te importa me quedo en tu blog.
ResponderEliminarhttp://lascosasdebarroso.blogspot.com/
Dos años más tarde leo tu crónica uy me dan todavía más ganas de correr.
ResponderEliminarMuy buena crónica
Más de dos años después de que sucedió, estoy leyendo tu relato de NY.
ResponderEliminarMaravilloso NY!
Saludos desde México
http://www.cronicasmaratonytriatlon.blogspot.mx/
Emocionante ... algo que seguro no olvidaras nunca .
ResponderEliminarY esto señores ES ASÍ.
ResponderEliminarDoy fe.